Dices que la quieres, dices que
ella lo es todo para ti… y después que? Te quedas sentado en una silla
esperando a que ella te envíe un puto sms, que te llame o lo que es peor
esperas que ella vaya una vez más detrás de ti pidiendo explicaciones, buscando
respuestas a preguntas que no logra entender, ¿y que haces tú? Nada. No
respondes a esos mensajes, no contestas esas llamadas y lo peor es que tú no
vas detrás de ella. Levántate de una maldita vez y abre los ojos. Fíjate si la
gente que te rodea busca tu bien o simplemente te toma como una marioneta y
hacen contigo lo que quieren. Y lo que es más importante, por una vez, por
favor, date cuenta de lo que estás consiguiendo y perdiendo con tu actitud de
niño malo. ¿La ves? Se va a ir.. y motivos no le faltan. Así que ésta es la
última oportunidad que tienes para hacer por una vez las cosas bien. Sí, lo sé.
Yo no soy nadie para decirte todo esto cuando ni si quiera nunca hemos hablado
pero con más razón. Yo soy una desconocida para ti y no tengo ningún interés en
decirte esto, pero lo hago. Porque no puedo ver como estas siendo tan sumamente
imbécil de dejarla ir. Te estás equivocando, ya lo hiciste una vez, ahora que
tienes una nueva oportunidad no la dejes escapar. Si a ella le dices “quédate”
sin hacerte ninguna pregunta se quedará, lo sé. Pero dile que se quede.
Si decides seguir con esa actitud,
recuerda que este tren no volverá a pasar por esta estación y que ella ya no
volverá a ir detrás de ti. Simplemente se irá y buscará una nueva vida en la
cuál tú sólo formarás parte de su pasado y te recordará como aquél chico con el
que podría haber salido bien. Ahora mismo sois dos enamorados separados y que
se quieren aunque ninguno de los dos lo reconozca. Pero sabes cuantas personas
se morirían porque alguien les quisiese como ella te quiere a ti? Pues no te
des la oportunidad de tu sentir eso y arrepentirte de que alguien te quiso de
verdad, de que alguien lo hubiese dado todo por estar contigo aunque sea una
fracción de segundo, alguien que te quiso de verdad… Así que por favor, haz las
cosas bien, busca tu felicidad en un sitio donde la gente no vaya a
perjudicarte, deja que ella te cuide, deja que ella te ayude y lo más
importante deja que ella te quiera. Recuerda que una sola decisión en ése
momento podrá hacer de ti alguien nuevo o bien seguir como hasta ahora, valora
lo que pierdes y lo que… dejas de ganar.
Ya no eres el que eras antes.
Me encanta esta entrada. No es preciosa, es lo siguiente. Creo que a más de uno le vendría muy bien leer tus palabras y meditar sobre ellas.
ResponderEliminarAprovecho para darte una vez más las gracias por todo tu apoyo, pequeña. Y para decirte que tienes un corazón que no te cabe en el pecho. Un beso muy grande, (K).